
Ama Befana. La dualidad hecha Fetiche. Porque como ella mismo nos aclara: «Ama es mi ser dominante. Befana es mi ser espiritual». Y ambos se cruzan en su primera mixtape para La Melona Sello, seis canciones dispuestas a incendiar las plataformas digitales y, de paso, convertirse en santos -nada celestiales- de nuestra devoción.
Tras tres hits inapelables -«Cavalli», «Balas y mentiras» y «Geisha»- esta madrileña de ascendencia andaluza e italiana sigue empeñada con este «Fetiche», para nuestro bien, en convertirse en una de las rutilantes estrellas del reggaetón nacional. Y en una de las nuevas promesas de nuestra música urbana.
En «Fetiche», ya disponible en plataformas digitales, Ama Befana cuenta con la producción de Charliler, toda una garantía a los beats que se ha convertido en su particular ángel de la guarda. No confundir con «Ángel de la Guarra», otro de los brutales temas que integran este «Fetiche».
Estética bdsm e iconografía kink pasado por una turmix choni a mil revoluciones y en continua efervescencia. Así es «Fetiche» y así es Ama Befana. «Hay mucha más gente de la que se piensa practicando bdsm o con fetiches fuera de lo común», nos confiesa nuestra ama favorita. «Quién sabe si Ama Befana suena ya en alguna mazmorra de por ahí durante alguna sesión».
«Fetiche» nos llega hoy viernes 19 de marzo de la mano, recordemos, del siempre inquieto sello gallego La Melona. una auténtica máquina de descubrirnos fantasías. A ellos les debemos aquel boom glorioso de Esteban & Manuel hace unas cuantas temporadas ya, o el haber puesto en el candelero últimamente a una de las bandas más adictivas del panorama nacional, Mundo Prestigio. Por citar solo dos de las joyas de su factoría.
Con Ama Befana vuelven a dar en el clavo. Todo un animal escénico, como pudimos comprobar en el último Monkey Week SON Estrella Galicia. Y un talento artístico de la cabeza a los tacones. Algo que «Fetiche» vendrá sin duda a corroborar, un trabajo discográfico que promete sacudir nuestra escena más independiente y convertir a esta jovencísima promesa en toda una realidad. Y de paso, claro, poner nuestras nalgas a sudar. ¡Que es lo que nos gusta, bitches!
Foto: promocional.