
Entre mambo, funk y electrónica, Benito Cerati presenta “Agujero Negro”, una píldora anticipada de lo que será su próximo álbum Shasei, donde se presenta por primera vez con su nombre.
Un agujero negro es una curvatura del espacio-tiempo, envuelta por una superficie cerrada conocida como horizonte de sucesos. Dicha región finita tiene como particularidad su elevada masa la cual supone que nada, ni siquiera la luz, pueda escapar una vez la absorbe.
Dicho fenómeno no ocurre solo en el espacio, muchas personas son capaces de generar el mismo efecto cuando la ley de la atracción entra en juego. Precisamente, de eso trata el último single de Benito Cerati, sobre ese primer, intenso, irresistible y prohibido encuentro, que luego nos mantiene absortos imaginando un “horizonte de sucesos” y escenarios ficticios que deseamos se conviertan en realidad.
“Agujero Negro” es la antesala de Shasei, un álbum que gira en torno a las aventuras adolescentes, la intensidad de las primeras veces, los errores, el paso del tiempo y la convivencia entre la naturaleza y la tecnología, que bebe de la música ambient y los soundtracks de películas de espionaje. Un disco barroco, con muchas capas espaciales, nocturno y sensual
Benito Cerati nació el 26 de noviembre de 1993 en Santiago de Chile. Criado entre músicos, puesto es el hijo del reconocido Gustavo Cerati, estuvo siempre rodeado de instrumentos. A los 18 años formo la banda Zero Kill con la que editó cuatro Albumes (Trip Tour, Alien Head, Unisex y Lapsus).
El éxito de la banda les llevó a recorrer los escenarios de Argentina y Latinoamérica, y a presentarse en festivales como Ruido Fest, Personal Fest, Lollapalooza y Vive Latino. En 2014 fue nominado por primera vez a los premios Gardel a Mejor Álbum Artista Nuevo Pop, y en 2018 y 2020 sus álbumes fueron nominados en el rubro Mejor Álbum Alternativo. Ahora mismo, Cerati, está por editar su primer disco en solitario, ‘Shasei’.
Foto: promocional.